¿Qué escondes detrás de cada mentira?

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Padre del Deconstructivismo, Jacques Derrida es seguramente el filósofo y escritor más polémico e influyente del siglo XX. Nacido en Argelia en 1930, se exilió en París para iniciar sus estudios académicos. Este autor revolucionó todas las bases del estructuralismo y arquitectura gramatical occidental, dando lugar a diversos neologismos y terminologías que le supondrían un reconocimiento mundial.
Pensó mucho sobre la política, sobre la comunicación, y sobre cómo la comunicación construye la política. Hoy tomaremos una de sus frases como disparador: "Lo relevante en la mentira no es nunca su contenido, sino la finalidad del mentiroso". Derrida ponía énfasis siempre en el objetivo final de la mentira, y de toda acción humana, porque detrás de cada acto, cada palabra, cada declaración que realizamos, hay una intención, una meta, un objetivo, un por qué hacemos lo que hacemos y qué buscamos con ello.
Me quedo pensando en lo recién escrito, usar una frase como disparador... ¿para disparar qué? ¿a quién, o quiénes? ¿qué es disparar una frase? ¿por qué usar esa terminología bélica? El lenguaje cotidiano tiene eso, decimos y escondemos, escondemos un trasfondo, una intención consciente o inconsciente, lo que pensamos y no decimos cuando decimos. Esa deconstrucción del lenguaje, el pensar cada palabra y su significado, el analizar el metamensaje por sobre el mensaje, es lo que se propone. 
¿Qué hay atrás de la mentira? ¿Cuál es la finalidad de la mentira? Vivimos en un mundo de mentiras. Recibimos y damos mentiras todo el tiempo, mentiras "piadosas", mentiras que son "políticamente correctas", mentiras sentimentales, laborales, sociales, universales. Mentimos, a veces, cuando respondemos al ¿todo bien? de quien nos cruza en la calle; mentimos cuando preguntamos ¿todo bien? y no nos interesa la respuesta en realidad (ya hemos abordado eso acá). Mentimos cuando respondemos sobre ¿cómo me queda esto?, o ¿estoy más gorda? Mentimos para aparentar ser lo que no somos. Mentimos en Navidad y en el día de Reyes. Nos mintieron con la cigüeña. ¡Y con el Hombre de la Bolsa! Nos mienten los políticos cada día, y encubren e instalan esas mentiras los medios de difusión hegemónicos.
Y andamos por la vida sabiendo que todo es mentira, pero nos reconfortamos en la mentira. Y aceptamos creer las mentiras, y ser cómplices para apoyar nuestras posturas. Si el lenguaje construye, crea realidades, entonces la mentira es parte creadora, pero ¿qué mundos crea la mentira? Hagamos la convención de que aceptamos que la mentira es parte de nuestras vidas, de nuestras formas mentirosas de vida, pero al menos discutamos la finalidad de la mentira, cuestionemos lo que se oculta y cómo afecta a nuestras vidas, individuales y colectivas.

Y vos, ¿Qué escondes detrás de cada mentira?
Marcelo J. Silvera


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